Intercambiador de calor industrial: cuáles son sus usos y beneficios
Existen sectores en los que la participación del intercambiador de calor industrial es imprescindible, ya que a lo largo de todo el proceso es necesario mantener un control de la temperatura muy preciso.
Nosotros tenemos intercambiadores de calor industriales de varios tipos, como los siguientes:
- Intercambiadores de calor de placas,
- Intercambiadores de calor monotubo,
- intercambiadores de calor tubulares
- Intercambiadores de calor de superficie rascada
Tabla de contenidos
La importancia de los intercambiadores de calor industriales
Gracias a los intercambiadores de calor en la industria, es posible controlar los grados en los procesos de fabricación. Aquí, cada uno de ellos cuenta, ya que uno solo puede afectar a la elaboración de productos químicos o a la de principios activos.
De esa manera, los intercambiadores de calor en la industria alimentaria, o en cualquier otra, mueven el calor de un medio a otro, lo que consigue calentar, enfriar, condensar o evaporar fluidos. Todo ello lo hace sin que se mezclen en ningún momento, a la vez que consiguen que el gasto energético sea menor y que las máquinas duren más.
Aplicaciones de un intercambiador de calor industrial
Son muchas las aplicaciones que tienen estos intercambiadores, las cuales cambian en cada una de las industrias en las que están presentes.
En la industria alimentaria
Se utilizan a la hora de pasteurizar, enfriar líquidos, o mantener productos a temperaturas seguras sin comprometer su calidad. Por ejemplo, en el procesamiento de leche, zumos o cerveza, los intercambiadores de calor de placas de nuestro catálogo son ideales por su eficiencia térmica y facilidad de limpieza.
En la industria farmacéutica
Los intercambiadores de calor en la industria farmacéutica, en un sector en el que la esterilidad y el control de temperatura son críticos, permiten calentar o enfriar soluciones sin riesgo de contaminación cruzada. Son clave en la producción de vacunas, sueros, cosméticos y principios activos.
Recordemos que, debido a cómo se han fabricado, los líquidos jamás se mezclen entre sí.
En la industria química
En ese sector se emplean para controlar reacciones exotérmicas, condensar vapores o mantener fluidos a temperaturas estables. Gracias a su robustez, los modelos tubulares que ofrecemos en GARGIL soportan condiciones exigentes, como altas presiones y fluidos corrosivos.
Ventajas de los intercambiadores de calor en procesos industriales
Como se puede ver en las aplicaciones de un intercambiador de calor, su uso representa una mejora en cualquier planta de producción en la que se necesite de un control térmico.
Al contrario de lo que se puede pensar, no hablamos de un componente auxiliar, sino de un elemento estratégico. Tiene un gran impacto en la rentabilidad de los procesos productivos y en su eficiencia.
Mayor productividad
Gracias a su capacidad para calentar o enfriar fluidos de forma rápida y continua, los intercambiadores de calor ayudan a rebajar los tiempos de procesamiento. Esto se traduce en periodos de producción más cortos y en un mayor rendimiento.
En sectores como el farmacéutico o el químico, donde los procesos térmicos deben ser extremadamente precisos y controlados, los intercambiadores garantizan que las condiciones térmicas sean las ideales en todo momento, consiguiendo que la calidad del producto siempre sea la misma.
Eficiencia energética superior
Uno de los beneficios más destacados de los intercambiadores de calor en la industria es su capacidad para aprovechar el calor residual de un proceso para precalentar otro fluido, reduciendo el consumo energético.
Esta recuperación térmica permite reutilizar la energía en lugar de desperdiciarla, lo que se traduce en un menor uso de combustibles o electricidad. De esta forma, en una planta alimentaria, el calor de un producto que ya ha sido pasteurizado puede utilizarse para calentar el siguiente lote, disminuyendo el gasto térmico general.
Más seguridad y control sanitario
Los intercambiadores de calor evitan el contacto entre los fluidos fríos y calientes gracias a su diseño. Esto minimiza el riesgo de contaminación cruzada, lo cual es crucial en la industria alimentaria y farmacéutica.
Además, una buena parte de los modelos se limpian con sistemas CIP, gracias a los cuales no hay que desmontarlos para higienizarlos.
Cómo elegir el intercambiador de calor industrial más adecuado
A la hora de escoger uno u otro hay que fijarse en el precio, pero ese no es el único factor que hay que tener en cuenta.
Tipo de fluido
La clase de fluido con la que se trabaja es el que hace que se escoja uno u otro intercambiador de calor. Así, fluidos limpios y de baja viscosidad son los mejores para los intercambiadores de placas.
Si hay líquidos con partículas o viscosos necesitan un enfriador tubular, mientras que los corrosivos requieren de enfriadores fabricados en materiales como el acero inoxidable.
Condiciones térmicas: temperatura y presión
El intercambiador de calor industrial se tiene que dimensionar teniendo en cuenta la temperatura de entrada y salida de los dos fluidos: el diferencial térmico y la presión de trabajo. Hay que tener cuidado, puesto que es muy común sobredimensionar o infradimensionar el equipo.
Escoger un intercambiador de calor industrial no es sencillo y resulta muy fácil equivocarse a la hora de hacerlo. Sin embargo, es una parte esencial de los procesos de fabricación, por lo que lo mejor es pedir consejo a nuestros expertos, quienes buscarán entre toda la gama el intercambiador que dé un resultado óptimo.
Contacta con nosotros y te ayudamos a elegir el intercambiador de calor industrial mas adecuado para tu empresa
Jose Antonio Garcia Mompeán es Ingeniero Técnico Industrial y Director de Gargil Suministros industriales desde el año 2005