Válvula de retención: qué es y cómo es su funcionamiento

La válvula de retención es uno de los componentes de los sistemas industriales. De hecho, sin su participación mover líquidos sería imposible, puesto que no irían en la dirección adecuada.

Podemos ver esta válvula  de retención en una bomba de agua, o cuando se mueve cualquier otra clase de líquidos, fluidos o gases, pues estos tienden a volver al origen en determinadas situaciones.

Qué es una válvula de retención

A las válvulas de retención también se las conoce como válvulas check. Su función tiene que ver con la dirección del flujo de un fluido en un sistema de tuberías y conductos.

Así, a la pregunta de para qué sirve una válvula de retención, podemos responder que consigue que los fluidos no retornen. Una vez que salen de la bomba y pasan por esta válvula, bajo ninguna circunstancia pueden entrar de nuevo en la bomba.

Dicho de otra manera, la función de la válvula de retención es hacer de barrera con el fin de que los fluidos siempre vayan en la dirección que nosotros queramos, no se mezclen, no entren en las bombas, etc.

Usos de una válvula de retención

Esta válvula de retención tiene una gran cantidad de usos. Es muy polivalente, de manera que siempre que haya un fluido (o un gas) que pase por un tubo, la vamos a ver en acción.

Prevención de retroceso en sistemas hidráulicos

Quizá su función principal. Si pensamos en las tuberías que hay en las plantas industriales, lo cierto es que estamos ante un sistema hidráulico de lo más normal.

Aquí la válvula de retención se cierra de manera automática si la dirección del flujo cambia. De ese modo, previene daños graves en todo tipo de maquinaria.

Impiden que el fluido entre en la bomba al apagarse

Hay varias situaciones en las que se puede dar un cambio de dirección de los líquidos, pero una de las situaciones más peligrosas es cuando la bomba centrífuga se para o se apaga.

En ese momento, no hay nada que dé impulso y el fluido puede volver hacia la bomba de nuevo. Las válvulas protegen la integridad de esta, a la vez que ahorran mucho tiempo a los trabajadores.

Sin la válvula, cada vez que se iniciase la bomba habría que purgar el fluido de la línea de succión, algo que no hay que hacer gracias a la válvula de retención.

Protege a los sistemas de climatización

Los sistemas de climatización son comunes en muchas industrias. Refrigeran las plantas, ayudan a que los operarios estén más cómodos, mantienen las cámaras frigoríficas a la temperatura adecuada, etc.

Esta climatización funciona con un gas refrigerante que va en una sola dirección. Sin la válvula de retención, el gas podría volver al compresor. No habría una rotura del equipo, pero sí afectaría a la eficiencia del sistema.

Previenen la contaminación en la industria química

La industria química emplea algunos fluidos que no conviene que se mezclen. Por ejemplo, podemos hablar de los corrosivos, aunque no son los únicos que no queremos que se junten.

Mediante un mecanismo tan sencillo como una válvula de retención, los productos químicos van en la dirección correcta. Se evitan así accidentes que pueden llegar a ser graves, lo que garantiza la seguridad del personal de las plantas químicas.

Impiden que el fluido entre en la bomba al apagarse

En todos los sistemas hidráulicos el golpe de ariete es algo muy peligroso. Este se ocasiona aguas arriba de la bomba si esta se para de golpe. Aquí, dentro de la tubería se generan unas ondas que pueden entrar en la cámara de la bomba.

Cuando esto ocurre, se genera el golpe de ariete que puede llegar a romper la bomba o algunos de sus componentes si la presión es alta. Con esta válvula se previene la aparición de este efecto.

Cómo funciona una válvula de retención

El funcionamiento es muy sencillo e ingenioso. Eso las hace económicas y ha permitido que se extiendan a todas las industrias en las que hay fluidos o gases circulando por tuberías.

¿Qué componentes tiene?

Cuando vemos una de estas válvulas, lo primero que apreciamos es el cuerpo. Dentro está la aleta de cierre o el disco, que son los que controlan el flujo. También hay un mecanismo de resorte que ayuda a que el bloqueo sea automático.

Si la dirección es la correcta, el disco se levanta

Una vez que la bomba empieza a funcionar, el líquido o el gas fluye. Si lo hace en la dirección que debe, el disco de la bomba se levanta y permite el paso. Eso se consigue con la propia presión del fluido, puesto que actúa sobre el disco y vence la resistencia del resorte.

El disco se cierra si la dirección del fluido no es la adecuada

No es raro que el líquido retorne, por ejemplo, cuando se apaga el sistema. En este caso funciona el resorte que cierra la válvula.

Aquí no hay presión que venza la resistencia del resorte, así que este actúa de manera “libre” y cierra el disco con un cierre mecánico. De esta forma tan sencilla, se previene el retroceso del fluido.

Gracias a la válvula de retención se consigue que los fluidos en las fábricas siempre vayan en la dirección adecuada. Es un mecanismo muy sencillo (funciona mediante un simple resorte), económico y con el cual se previenen roturas e incluso accidentes por la mezcla de productos químicos.